CUANDO SE ASOMA AGOSTO –I I-
¡¡QUEE HAYY...... ,QUE...!!
Han pasado unos años y estamos en la década de los setenta. Empieza a “olée” a turismo que llega del extranjero, excursiones que bajan de la Peña de Francia, y echan todos los deshechos de sus comidas en la Huerta del Señor Román, pisan la hierba y le hacen enfadar. Aquí, haría falta un parque, dice Pedro. ¡Fijate! En las calles echan papeles, latas,..y.. El bando es riguroso, la orden del señor alcalde que se barran las calles gusta ya menos a algunos de los vecinos.
Lo hacemos para nosotros / lo hacemos con ilusión.
Si hay bando y obligación / mejor ya que lo hagan otros.
Por la Juani y su amiga han pasado algunos años; mientras ellas, piedrecita a piedrecita tienen que barrer su “cacho”, Manuel le dice trovando así a Vicente:
Obligar, ya menos gusta / no es lo mismo el tropezón
Cuando la causa es muy justa / que si encima hay criticón.
Vicente se queda pensativo. Admite el reto y le contesta:
“¿No dicen que hay muchas moscas / avispas y “cagajones”
Y que las casas son toscas?
Pues mira, hay tradiciones.
- Contesta,Tino- flamante
Y se quedan boquiabiertos.
Pues les echemos un guante
Dice Trini, y es bien cierto.
Con nuestras fiestas “p´adelante”
¡Y si nos compran los huertos!
Se les venden al instante.
Los huertos yo no los vendo / pero si quieren patatas
O buenas frutas, si tengo. / Pero ¡bah! Te dan la lata...
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