miércoles, 30 de junio de 2021

EN BUSCA DE LA PECULIARIDAD QUE NOS CARACTERIZA / CATALINA- LA LARATA

















EN BUSCA DE LA PECULIARIDAD QUE NOS CARACTERIZA

-Este es el rasgo, la señal, la marca, el aspecto,… el significativo detalle que va de paso en paso a través de los tiempos-.

Hay personas muy sencillas del mundo rural de los sesenta que se han distinguido por su agradable atractivo natural y serrano. Y algunas con rasgos  artísticos  que  les enorgullecía que se fijaran en ellas escritores, intelectuales y en especial pintores. Por ser portadores de una imagen que caracterizaba a sus antepasados. Y así, entre las gentes del pueblo se decía: a Luis Puerto le fotografió Ortiz de Echagüe, a la madre de Teresa la pintó Sorolla.  La Tía Triz, la señora Dolores o las Magallas posaron para Ismael Blat.

Este fijarse en una determinada persona por un reconocido artista les daba estima,  notoriedad de ser portadores de una peculiaridad natural y especial de aspectos característicos  y  tradicionales.

En este retrato hecho al carboncillo sobre tabla preparada con técnica mixta por María José Barcala se enorgullecía de verse esta albercana, conocida entre sus paisanos por el sobrenombre de la Larata.

Esta señora se llamaba Catalina y se daba a conocer con el nombre de Cata. Entre sus amigos y familiares La Larata.

“Hilaba- nos dice María José- en la  rueca, torciendo la lana con sus largas y elegantes manos, con el fin de que en las prendas no se formaran las feas bolas, que hoy día vemos en  tejidos  que  se utilizan a diario  y que da lugar a que se tenga  que emplear  una maquinilla que funciona  a pilas”.

Y siguiendo con nuestro escrito de costumbres, vida y tradiciones, con un aire y espíritu  lorquiano nos atrevemos a manifestar:

 Una copla popular / Viene a mi oído diciendo

La Larata .La Larata. / Parece que la estoy viendo.

¡Y qué bien caracterizada!

 

La rueca no se movía / -Muy quieta junto a su cuerpo-.

Era el huso el que giraba.

Y poco a poco formaba

Un rollito.

            Que surgía

Juguetón.

                Y trotano.

 

No dejaba de saltar / Mientras movía las manos.

Era su oficio. Y no en vano

            El hacer. Sonreír e hilar

                        Con sentimiento albercano.

 

 ¡Joven! Mira esas bolitas/ que tienes en tu jersey.

Con la rueca no pasaba /-Bis- .

Su buen “huso” era de ley.¡Qué bien Catalina hilaba!

            ¡Qué bien Catalina hilaba!

 Estamos seguros que a muchos jóvenes de hoy les agradará  ver estas imágenes de personas que aunque ya no estén entre nosotros expresan en sus rostros los rasgos más característicos de nuestros antepasados; para orgullo saber y sabor de nuestra raza.