UN VIAJE POR
GOOGLE
-EN EL ESPACIO Y
EN EL TIEMPO-
-EL HOTELITO DE JESUSA-
Si utilizas
Google Mats y te acercas con ello casi a lo imposible, que es posible, conducir
por carretera y no tener un accidente con tu ratón-conductor-coche, verás que puedes llegar a nuestro pueblo, hoy casi medieval
como es La Alberca.
No te permite
entrar al pueblo, ni molestar a los vecinos. Y si no te puedes acercar mucho,
lo verás en su conjunto, gozando de sus
campos y paisajes.
Hemos llegado a
una curva a tres pasos de La Puente. Allí está hoy una casa particular de los
hermanos Mari Carmen y Roberto García. A nuestro entender le faltaría una placa
con el nombre del Hotetito de Jesusa, pues bien se lo merece. Si Don Bartolomé lo
impulsó para ese fin. Fue sin duda, Jesusa quien le buscó su verdadero fin. La
primera mujer emprendedora en el aspecto turístico que acogió como casa
familiar a familias, de escritores, pintores, cineastas que acudían a La
Alberca durante los veranos repitiendo año tras año. Ya, si hubiera vuelto
Sorolla no se podría quejar de aquellas posadas y fondas que no tenían el
aspecto que La Alberca se merecía.
Para Jesusa,
nunca fue un lugar de paso, sino de temporada veraniega. Don Alfredo, Bonifacio
Lázaro, Álvarez del Manzano pudieron disfrutar de esta agradable estancia,
hasta con interesantes exposiciones de sus trabajos realizados en el tiempo de sus permanencias. Y si había alguna dificultad se resolvía entre nosotros “le tienes
que dar a mi hijo clase de Matemáticas y tienes que ser tú,me decía Doña
Natalia”.Bueno, pues tanto se empeñó que le di clase ese verano, como aprobó y
con buena nota ella tuvo un buen detalle y yo la satisfacción de haber dado la
primera clase de Matemáticas y quedar en buen lugar.
Cuando acababa
la temporada, he dicho antes que exponían sus trabajos y se comentaban, pasando
un rato agradable y Jesusa recuerdo que invitó en ciertas ocasiones a los
asistentes con unas obleas y un refresco.
Esos son los buenos detalles de una mujer emprendedora, tener contentos
a clientes y amigos, colaborando en ello Mari Carmen con sus conocimientos de francés y
Roberto con su amabilidad, simpatía y
conocimientos sobre este pueblo tan típico y tradicional. Hoy La Alberca tiene
muy buenos hoteles. Pero tenemos que tener presente el impulso que le dio
Jesusa a esta industria del turismo que por aquel entonces muy poco se valoraba
y era más que nada de lugar de ave de paso.
