CUENTOS DE NOCHE DE REYES- EL ESPEJO DE LA PEÑA DEL HUEVO

CUENTOS DE NOCHE DE REYES

     -EL ESPEJO DE LA PEÑA DEL HUEVO-

Hoy los niños están inquietos, corren por pandillas con sus aros de un lugar del pueblo a otro. El frío les impulsa a que no se detengan. Han llegado ya algunos campesinos al pueblo montados en sus caballerías, con las ovejas, cabras y la vaca. La mujer de las Ánimas empieza a hacer su recorrido, toca su campanilla, recita su salmodia habitual y se va a otra esquina.

De pronto se ha ido la luz eléctrica. Acababa de llegar, de encenderse para el alumbrado público

Los niños que en su mente tienen  la llegada de los Reyes Magos, se detienen haciendo un gran corro a la entrada de la Calle del Tablado. Saltan y cantan:

¡Qué venga la luz / Que venga la luz!

Que la traiga muy pronto

El Niño Jesús.

Pero al ver que no llega, ahora salen todos corriendo hacia la Balsada. Se suben a la barandilla de la fuente y se montan unos sobre otros cantando:

Este niño es tonto / Pues no sabe cantar

Encima de él me monto

Y empiezo a caminar.

Y siguen: “¡Qué venga la luz, que venga la luz// que la traiga muy pronto/ el Niño Jesús”.

En la Plaza junto a los peldaños de la Cruz, hacen el cambio correspondiente:

Hoy nadie se pelea / nos toca cambiar

Si el caballito se cansa

Ya lo debes de parar.

-¡Qué venga la luz, que venga la luz (…)

 Y de nuevo corriendo con sus aros se van hacia el Barrionuevo. Allí, junto a la fuente, siguen con sus juegos y canciones:

El cambio ya se ha hecho / te toca cargar

¿No puedes? Echa pecho.

Que tengo que luchar.

-¡Qué venga la luz, que venga la luz (…)

Al verlos tan contentos un grupo de mujeres se acerca a ellos entonando… Ellos ni cortos ni perezosos continúan con la canción que viene entonando el grupo de mujeres

“¡Que venga la luz!, ¡que venga la luz (…) y siguen:

“Ya vienen los Reyes / por los Sindrinales

Ya le traen al Niño

Muy ricos pañales.

Mas. ¿Qué es lo que pasa? De pronto el pueblo se oscurece y no viene la luz. Unos dicen que un camión ha caído un poste. Otros que como no llueve el suministro de las Casas es insuficiente.

Los niños ya no cantan: ¡Qué venga la luz,…” marchan por la calle silenciosos a sus casas.Se hace de noche.

Pero…¿Qué va a pasar esta noche si no se repara el suministro eléctrico? Algunos de ellos, desde esta mañana han dejado puestos su zapatos  muy limpios en las ventanas que dan a la calle. Pero si no viene la luz, la confusión va a ser un caos. Un chavalillo dice “espero que no me pongan en mis zapatos la ropa que ha perdido mi hermana”.

Pero esto hay que arreglarlo: Un buen grupito de estos niños se sientan junto al rincón de  la Maína, de la esquina de la calle del Tablado. Y se ponen a hablar y contar cosas  que se les va ocurriendo.

¿Qué os parece si le pedimos al alcalde, señor Román, que pongan encima de la Peña del Huevo un espejo gigante. De quince por quince metros ¿sería suficiente?

Pero…¿Para qué? -Contesta otro. Y el más ocurrente se explica “reflejaría la luz del sol y tardaría más tiempo en hacerse de noche”.

“¡Oye y si fuera muy potente!”- decía otro que había ido con su padre a vender turrón a la fiesta de San Martín, allí también se ve la Peña del Huevo. De modo que podrían quedar iluminados: Monforte, Mogarraz, Las Casas, El Soto, el Madroñal, Miranda, el Casarito, la Nava,..

Bueno…Bueno. Pero tiene que ser muy potente.

Al instante: ¡Fausti…”arreando ya “p´a” casa!” “ ¡Kisco, Hisco pá rriba” ¡Vamos ya Juani!

Y el grupo ha quedado disuelto; se han ido para sus casas cabizbajos. Benito le ha dicho a uno de ellos que ha visto a su madre en “ca” el comercio de la Pilata, pero ahí ha quedado todo.

Y esta noche sin luz, seguro, seguro que no habrá Reyes. La Cabalgata que iba a venir a las escuelas han dicho en la calle que se estaba preparando con antorchas pero sin luz y con tanto frío, había quedado suspendida.

Sin embargo, el misterio ha quedado en el aire. -bueno algo les traerán por muy oscuro que sea- pero la idea sigue en pie:- El espejo de la Peña del Huevo.

¿Admitirá esa idea el señor Román Romanones, dinero dicen que tiene mucho, pero pocas ganas de soltarlo. Veremos a ver qué pasa y el espejo, el espejito podrá ser bien instalado.

-En uno de los cuadros se ve cómo fue felizmente colocado el gigantesco espejo, antes de ser destruido por un grupo de buitres gamberros que nunca aceptaron que dominara su territorio-. Firmado y recopilado por Isibe.

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