EL TEATRO-I I- PARTE EXTERIOR, HISTORIAS Y ANÉCDOTAS

EL TEATRO—I I – PARTE EXTERIOR,  HISTORIAS  Y
ANÉCDOTAS

 La más atractiva es la que da a la Plaza con sus soportales y poyetes, columnas que merecen una observación detenida, balconaje de madera en su parte superior y característico entramado local.

Un lateral da al callejón por donde sale el toro y el otro tiene las columnas adosadas al edificio.
 En la calle de la Puente, tiene un capitel señal de la Casa de Alba, a quien en un tiempo perteneció.
En sus poyetes y ocultándose entre sus columnas las madres se sentaban para ver en  las tardes de los domingos con quien bailaban sus hijas en aquellos bailes de tamboril que predominaba más el suelto que el agarrado. Y se vendían chochos en cucurucho de papel, turrón, caramelillos y los ricos “pirulíes de Sergio”, en puestecitos que se ponían junto a sus columnas.
Desde dentro de la taquilla, dicen que durante un tiempo observaba el cura los bailes mientras se vendían las localidades del cine. Dicen...
El exterior bien cuidado / De aspecto sensacional.
Nombre popularizado:
El Teatro –y no está mal.
Tuvo centro cultural / Y cinema en su momento.
Charlas, magia, recital
De digno acontecimiento.
Hoy a secas, es El Teatro / De sus artistas locales.
Si entran treinta, ciento cuatro / Cantan, aplauden,...¡Geniales
Con su afición al teatro!

EL TEATRILLO CON PLATEAS
Antes de convertirse en cine recordamos aquel teatrillo con plateas que era casi familiar y que presidía el retrato de la escritora albercana Doña Dolores Mateos.
Era muy curiosos los medios que se utilizaban para imitar la lluvia, el llegar de unos caballos. El viento se hacía dando vueltas a una cuerda (guita) con un peso a gran velocidad. ¡ Ay, qué ver como bufaba...!
Venían comediantes de fuera y hasta se atrevían a hipnotizar (¿Vamos a ver, cruzar los dedos de las dos manos, cerrar los ojos y después de contar hasta diez, intentad separar las manos) (....)
Surgió la anécdota porque los comediantes se pasaron y tuvo que actuar ante una persona, nada menos que el médico – menos mal a Don Luciano, le decía la gente, si no te quedas así para toda la vida...)

LA CANTERA Y LOS GRANDES ARTISTAS
¿Quién no ha subido a estas tablas? / siendo niño o mozalbete?
Hasta el que escribe ( o te habla) / actuó con un roquete
De monago parroquial.
Lejano en tiempo te acerca / la canción en pentasílabos:
“Somos los chicos / de la doctrina
De la parroquia / de la parroquia
De La Alberca...”
(¡Bravo!, ¡bravo!, ¡bravo!,...
Si sabes más, manda copia.)

Y surgieron los Becerros / Pena, Bareses, Marcial.
Casas, Melota, Rivero / Susines, Andrea, Pascual.
Piri, Pepe el Juez, Platero / Luengo y Cateja, ya actual.
Moisés, Martina, Amadeo,...
Y tantos, y tantos, tantos,
Que quedan en el tintero.

 Los temas: dramas históricos/ comedias, historia, valor
Prima el recitar pletórico / la buena fama, el honor.
Y entre los aplausos y vivas nunca podía faltar el: “¡muchooo!”, los vivas y el “¡cartucho!”

SE LEVANTA EL TELÓN
-Y yo: Miguel Ángel Luengo / lo que digo lo mantengo-:
Si os cruzáis en el Solano / con charlatán caminante
Que lleva capa y espada/ decidle: ¡choca esa mano!
Eres un buen comediante / De Cateja y albercano
Y aquí no ha pasado nada.