CRÓNICAS
DEL SIGLO XX-EN TONO FESTIVO-I I-
-LA
LLEGADA DE LOS REYES MAJOS
DE
LA DÉCADA PRODIGIOSA-
Razón,
muchísima razón, teníamos los niños de La Alberca de los años 50, ya se habla
de la Década Prodigiosa. Faltan en nuestros escritos muchos nombres de amigos o
de chavales influyentes de aquella época, pues todos los del pueblo formábamos
una piña.
Nuestros
maestros nos enseñaron a distinguir la letra g de la jota, pero nosotros éramos
de la jota –baile-, se escribiera como se escribiera. El tiempo nos ha ido
dando la razón
que
los Reyes eran Majos, de majestuosos, majestad, majestuosidad; no vienen al
caso
“majorca,
majuelo, majara,…”
¿Por
qué se ha dicho que eran Magos? ¿Hacían magia? ¿Embobaban a las gentes con sus
artes y trucos? Hay quien me dice que posiblemente se haya tratado de una
errata de imprenta o de un copista desortografiado.
Lo
curioso es que estudios recientes afirman que estos reyes procedían de Tartesos,
ciudad que estuvo entre Trebujena, Sanlúcar de Barrameda y adentros de la
provincia de Huelva. El incienso es propio de esta zona, ya de tiempo
inmemorial se vendía en la puerta de de
Simago de Gadir y Baelo Claudia. La
mirra es una resina aromática muy propia
de al-Andalus. Y el oro ¿dónde es más abundante que en las minas de Riotinto? En
Huelva.
Y
ya estamos en Huelva y de allí cerca Moguer, cuna de Juan Ramón Jiménez y este
en sus escritos se caracteriza por el empleo de la jota y no de la letra ge.
Los
niños de la Década Prodigiosa de La Alberca, la emplean con tono suave.¡Atrévete
a decir tres veces seguidas “cohones”! A la tercera la vencida. Los Reyes Majos. También se dice –no desterrando la
letra g- que los reyes llevaban“anguarinas”,enormes capas propias de los
hombres albercanos.
La
cabalgata llegó a las escuelas donde repartieron muchísimas sonrisas y sólo cuentan que hubo un pequeño incidente,
cuando varios mozos quisieron poner delante de Melchor -Jesús Navarro- el burro
de Matías-, hubo un acuerdo el dejarlo
para carnavales; aunque tres señoras tuvieron que ser atendidas por el médico
don Luciano, por fuertes ataques de risa. Y sin más. Gracias Majos.
P.D.También tenemos que decir que el ambiente estaba muy animado con un altavoz de enorme potencia que ponía don Saturnino en lo alto de la torre Los peces en el río y ¡Ay del chiquirritín, eran los más escuchados En el comercio de Tere la Pilata cubrían los cristales con cortinas y en el del señor Honorio tapaban el agujero de la llave de la puerta para evitar informaciones maliciosas. No se nos olvide que eran los años más difíciles de la post-guerra. Aunque ilusión y animosidad había muchísima y en el baile de la plaza y el del salón de Julián los mayores pasaban muy buenos ratos. Y los niños a tirar bombas y cubetes, montar en los zambulerios y a animar las matanzas con sahumerios que daban muy buen ambiente.
Y luego por las noches a rondar por las calles cogidos del hombro. Para ofrecer al Niño Manuel, para ofrecer al Niño Manuel. Al Niño, al Niño, al Niño Manué...
¡A qué sí...! LA DÉCADA PRODIGIOSA
Las
fotos son de Rosa Gómez, que nos las presta gustosa por tener familiares
también implicados en estas historias.
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