PADRE ÁNGEL-20
AÑOS EN LA PEÑA DE FRANCIA
“La soledad como
todo en la vida puede tener su parte
buena y su parte mala. No se puede bajar la guardia nunca. Porque en la soledad
no hay peor demonio que uno mismo. Si te abandonas uno puede sumergirse en la
inercia de la desidia o del aburrimiento. La lectura estimulante de buenos
libros y una sana libertad que bien aprovechada te puede enriquecer bastante.
La soledad es todo un privilegio”
EL ÁNGEL DE LA
PEÑA DE FRANCIA
¡Qué bien debía de
estar / libre y tan cerca de Dios!
Al alba, al anochecer,…
Hablando con Él, los dos.
¡Qué bien debía
de estar!
Pero…Como buen
cristiano / su plenitud llegó ya.
Estando con Él, ufano
Después de tanto bregar.
Tu nombre lo
dijo todo / Ángel de Dios en la Peña
Nunca, nunca estando sólo.
Nuestra oración, sus señas.
Seguro también
hoy sigue / Desde el Campo San Andrés
Hasta el gran Salto del Niño.
Despidiendo con
cariño. / Arriba, les ve a sus pies.
Padre Ángel de
los cielos / Allánanos el camino
De malezas y tropiezos
Guíanos
por esos vuelos
Que llevan tus
santos rezos. / El sendero a lo divino.
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