IGLESIA DE NUESTRA SEÑORA DE LA ASUNCIÓN

IGLESIA DE NUESTRA SEÑORA DE LA ASUNCIÓN

 Iglesia, que con el torreón-fortaleza adjunto –obra anterior de los señores de Valdecorneja- y la soberbia construcción realizada en años posteriores, bien merece la calificación de templo catedralíceo.

Fue construida sobre la anterior iglesia en 1730 por el arquitecto Manuel de Lara Churriguera.

Para hacer una obra tan ingente los albercanos tuvieron que colaborar no sólo con sus aportaciones monetarias, según las posibilidades de cada uno, sino también adquiriendo tierras comunales que les iban a permitir labrar (llamadas datas) en una buena zona del pueblo como es “La Mata Menúa” y “Los Sindrinales”.

El edificio es un fiel reflejo de su época, siglo XVIII, destacando su monumentalidad y sencillez, de grandes columnas, arcos y bóvedas. Muy próximo al estilo neoclásico.

Es solemne y acogedor, De planta de cruz latina con el coro al fondo. Se sube al mismo por un lateral mediante una escalera de piedra y tiene un curioso y antiquísimo órgano de tubos que se accionaba por medio de un fuelle de viento.

En el interior del templo destaca su púlpito, de gran valor, su policromía envejecida contrasta con la tonalidad austera y tenue de la iglesia. Está considerado, siglo XII, del tiempo y estilo del Pórtico de la Gloria de Santiago de Compostela.

Son característicos del edificio sus dos pórticos de entrada. De columnas de granito cuadradas y bóvedas de ladrillo.

El pórtico que da a la plaza del SOLANO BAJERO , con escalinata y una larga y característica barandilla de piedra de granito, forma un conjunto admirable para la representación de actos religiosos y ofrendas al aire libre.

Cuando las representaciones salen del templo a la plaza y tienen carácter profano, esta forma un conjunto que es un auténtico “Corral de Comedias”. Representación viva de la época medieval con su singular Osario en una de las entradas, y donde se representa la Loa, tradicional Auto Sacramental del “Día´Agosto”.