Hubo un árbol, de proporciones gigantescas, enfrente de la famosa Fuente del Tablado, hueco por dentro y cobijo de niños. Desde allí se veía pasar al toro, al coche de línea,al Tío De´lunto,...la gente del pueblo lo denominaba EL ARBOLITO.
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ASOMADOS A LA SOLANA
EL EJEMPLO DEL
ARBOLITO
¡Demos
alas al país, a la zona, a la comarca, a los terrenos cercanos,…! Porque
arbolitos, aparte de este que comentamos, había más tanto en los caminos como en el interior de
los huertos de La Alberca.
Parecían
como muertos. / Pero, en verdad, no lo estaban.
Dichosos aquellos huertos
Que su terreno ocupaban.
¡Viva
el verso facilón! / Y esa rama que destaca.
Pero piensa en la ocasión.
¿Quién los sostuvo? Una estaca.
Siendo
el terreno baldío / y el arenal quien se
expanda.
Las lluvias, hojas, el frío,…
Y la “cagaluta”, manda.
Manda
con el “cagajón”./ Y la plasta de esa vaca
Di orgánico. Y tu opinión.
Al señorito le aplaca.
¡Cuántos!
¡Cuántos arbolitos!/ Ejemplos del tiempo son.
Grandes por diminutivos.
Fuertes, recios, fueron, son.
En
estos tiempos se echan en falta, esos árboles centenarios. Dicen que hoy viven
más rápidos y que los más jóvenes colonizan el espacio de los bosques viejos
por los efectos de la agricultura, los incendios, la deforestación y el aumento
de la temperatura. Un bosque(… continúa en la imagen de la lectura)
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